jueves, 25 de septiembre de 2014

Ser Trivoluntario en la Final Copa de Europa de Triatlon

¡Buenos días! Hace una semana vi en Twitter un anuncio de la federación española de triatlon indicando el poder ser voluntario o, como ellos lo llaman, trivoluntario, en la  Final del la Copa de Europa de Tratlon. Rellenas un cuestionario con tus datos y los días disponibles ya que, además de la Copa que era el domingo el sábado podía participar cuaqluiera en diversas pruebas de triatlon (olímpico, sprint, super-sprint...) entonces podías ser voluntario el viernes (como lo fui yo), para entregar los dorsales a los participantes del triatlon del sábado. El sábado (que yo no fui) se seguía entregando dorsales, ayudando al control de entrada a boxes y al avituallamiento, principalmente. Y el domingo, que fue el último día que fui y que fue un día para recordar toda mi vida, se celebraba paratriatlon y triatlon élite. El domingo se nos había convocado a las 7:00 así que para llegar bien, ya que tengo que coger cercanías y metro por donde vivo, me desperté a las 4:30 (¡que madrugón!) Llegué allí a las 7:00 y no se veía nada. Me acuerdo que estaban los paratriatletas preparando su transición y no veían nada.

Me fui a la zona de organización y... allí estaba, la carpa de los voluntarios iluminada por un foco. Se me dio la acreditación y una sudadera (la camiseta ya la tenía del viernes). Así que sin más pausa me dirigí a la transición, donde estaba, junto con otros voluntarios y oficiales, encargado. A las 8:00 salieron los paratriatletas. Yo me encargaba de abrir la ducha y, entre los voluntarios cubrimos el pasillo de entrada a la transición para que, ya que no había nadie, se sintieran arropados y hubiera ambiente y les animaramos. La verdad es que verles me hizo pensar en lo afortunados que somos implemente por ver, por tener piernas o por tener brazos.


La competición continuó hasta que dejaron las bicicletas entonces se nos dio la orden de, para dejar hueco libre e ir más rápido con la siguiente competición, guardar las cosas de cada paratriatleta en la zona de los atletas. Para mi fue un gran honor y gran responsabilidad el coger los neoprenos, las gafas, el gorro, la bicicleta y llevarla hasta la zona de los atletas. Hubo un momento de tensión, que finalmente se convirtió en anécdota, cuando un competidor no encontró sus zapatillas de correr. La primera mirada de los jueces se puso sobre nosotros ya que estabamos guardando las cosas y, claro, podríamos haber guardado sus zapatillas sin querer. Pero no fue así, nosotros no recogiamos nada hasta que el paratriatleta saliera de la T2 y saliera a correr. Al final el competidor se le había olvidado poner sus zapatillas de correr en la transición. Tuvo que irse al guardaropas y sacarlas de su mochila. Por lo demás todo normal. fuimos recogiendo todas sus cosas. De esto no tengo imágenes ya que estábamos trabajando a tope y no había tiempo de hacer fotos. Llegaron los paratriatletas y fueron recogiendo sin problemas sus pertenencias, un trabajo bien hecho.

La siguiente competición era la de élite femenina, donde corría la novia de Javier Gómez Noya y aprobeché para hacerme una foto con él mientras estaba en la cámara de llamada con su novia.
Cuando va de"incógnito" no se le reconoce tan bien jeje.
Salieron las chicas. Casillas no iba muy bien pero en la carrera a pie logró remontar y meterse en un 4º puesto a 30 segundos de la tercera. Toda una campeona. durante la carrera de las chicas me toco estar en control de accesos controlando que pasase solo gente con un nivel de acreditación. No tenía mucha miga. foto de Casillas corriendo:
Posteriormente llegó la ganadora de la prueba y de la copa:
Y se dio paso a élite masculina, a las 14:15. Aun no había comido. Tampoco quería comer, quería disfrutar y trabajar. Estuve un tiempo en transiciones sin hacer gran cosa. Posteriormente me volvió a tocar control de accesos. Luego comí (sobre las 4-4:30) y me fui a la llegada a quitar, junto con otro, los chips de los atletas. Fui quitandolos y dando la enhorabuena a cada atleta y, en especial, a los españoles (hay que barrer para casa).
Me encantó el poder ver la parte que nunca se ve de un evento como este, el poder tocar y estar al lado de las cosas de los triatletas y el bien ambiente que había entre los voluntarios a pesar de no conocernos de nada. Fue un fin de semana que nunca olvidaré y fue muy especial y valió la pena el cansancio y el madrugón. Os dejo con algunas fotos y con un video de TriatlonLand. Un saludo:






Y el único reportaje del paratriatlon que he visto, lamentablemente.



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